¡Buenas noches!
Acabamos de volver de la Primera Quedada de Luna Llena, en la que, como comenté en posts anteriores hemos realizado un ritual para pedir prosperidad a la Luna.
A nuestra llegada una imagen preciosa que comparto con vosotros a continuación.
El Sol, a punto de esconderse entre los árboles, nos dedicaba sus últimos rayos.
Para empezar el ritual hemos interiorizado qué es para nosotros la prosperidad, momento en el que algunos de los presentes han querido expresar públicamente sus pensamientos.
Después hemos hecho dos ejercicios de imaginación. En el primero hemos imaginado ser un ave, recorriendo todo el parque, sintiendo el viento en la cara, el sol en el cuerpo y el agua a nuestro alrededor. En el segundo hemos sentido el color dorado, símbolo de prosperidad, en nuestro cuerpo, introduciéndolo dentro nuestro o introduciéndonos nosotros en el color.
Entre medias de los ejercicios hemos escrito en un papel aquellas cosas que queríamos dejar atrás, que consideramos que no nos aportarán prosperidad en un futuro, para más tarde romper el papel para que se lleve con él todos los malos pensamientos. Y para poder, definitivamente, tener una mirada de optimismo hacia el futuro hemos echado ese papel, ya hecho trozos, en un recipiente lleno de agua, que, como sabemos, tradicionalmente es un purificador.
Una vez realizado esto, hemos empezado los ejercicios de respiración, realizando tandas de cinco respiraciones según nos iba indicando nuestra guía Elena.
Por último, la música de los cuencos tibetanos nos ha envuelto por completo. Una forma perfecta de alcanzar el punto álgido de esta noche.
Cuando hemos terminado hemos comentado nuestras experiencias durante estos ejercicios, y, está mal que yo lo diga, pero todos los presentes han quedado muy contentos. Han habido distintos puntos de vista y distintas experiencias, pero todos hemos sido testigos del poder de la unión de nuestras peticiones.
¡Una maravilla la tranquilidad de la que hemos podido disfrutar!
El lugar es un verdadero encanto, es mágico!!!! ayudo mucho en la primer quedada, tan bien dirigida por Elena.... ya quiero que sea la próxima!!
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